Ante la crisis sanitaria que atraviesa la población mundial, y precautelando la vida de todos los actores quienes conforma el fútbol, la mayoría de ligas han decidido suspender sus actividades hasta que la crisis se pueda controlar. Sin embargo, este no es el caso para la liga de Bielorrusia, que acaba de disputar la segunda jornada del campeonato.
Bielorrusia es un pequeño país limítrofe con Rusia, aquí el número de contagios por el Covid-19 es bajo, por lo que el gobierno de ese país aún no toma medidas para controlar la expansión del virus. Es por eso que la liga se sigue jugando.
Este domingo, el Isloch Minsk Raion se impuso (0 – 1) en el campo del Smolevichi. Este resultado deja al Isloch en la punta, junto con el FC Minsk, el Energetik Bgu Minsk y el Torpedo Zhodino.
La liga de Bielorrusia es poco llamativa y de las menos importantes a nivel europeo, sin embargo, al ser la única liga que «sigue con vida» se ha convertido en un refugio para los amantes del fútbol, que ven en ella, el escape de un mundo sin fútbol.