La Liga Checa dejó el fin de semana pasado una escena conmovedora. Lo que pudo acabar en tragedia quedó solo en un susto y eso fue gracias a Francis Koné. Bohemians 1905 y Slovacko se enfrentaban por la fecha 18 del torneo checo. Cerca del minuto 28, Martin Berkovec, guardameta del equipo local, quedó tendido en el suelo tras un fuerte impacto con un compañero. Koné, delantero del Slovacko, no dudó en auxiliar a su rival. Su rápido accionar evitó que se tragara la lengua, lo cual fue fundamental para que no se asfixiara y pudiera ser atendido.
Un fan que asistió al encuentro publicó en la web del club una especie de reportaje sobre lo ocurrido: “Dos tipos están sentados a mi lado. Racistas. Su vocabulario es ‘el negro’ y ‘el mono’. Y ocurre el choque. Martin está tirado en el suelo y no se mueve. Koné es el primero en llegar. ¿Un rival? ¿Un negro? ¡Un hombre!”.
Koné, nacido en Costa de Marfil, decidió jugar en el equipo nacional de Togo, el país de origen de su madre. El futbolista de 26 años tiene una larga carrera como profesional, antes de llegar al FC Slovacko, jugó en Tailandia (Muangthong United FC y PTT Rayong FC), en Omán (Al-Musannah SC), en Portugal (SC Olhanense) y en Hungría (Honved de Budapest).
“Quiero dar las gracias a Francis Koné, cuya rapidez me ha salvado”, escribió en Facebook Berkovec.